Fotografía
Compactas contra Reflex
El dilema de compacta o réflex se tiene a menudo cuando se va a comprar una cámara. Y si no se tiene y se va a comprar una réflex se debe de tener.
Detalle de foto de JOSE ANGEL ALONSO realizada con compacta |
Cuando
nos decidimos a comprar una cámara tenemos un presupuesto asignado que luego,
según se pongan los dientes más o menos largos, podemos incrementar.
Esto nos podría ayudar a decidir, de hecho lo hace si es escaso el presupuesto, pero
no tiene por que ser así. Lo más importante es la utilidad que le vamos a dar a
las fotos que realicemos.
Si uno pretende publicar en papel y a un nivel
profesional deberá de trabajar con réflex: un objetivo de 400mm o 600mm con
2.8f de primera marca puede oscilar entre 3.000 y 6.000€ y la camara superará
los 2.000€. No serán los unicos objetivos que deberemos de tener: otro par de
ellos, y cubrimos todas las focales habituales, de 2.000€ aproximadamente tiene que caer también para tener un equipo profesional con el que empezar a trabajar. Este equipo pesa más de 7kgs si vamos contenidos y por supuesto que faltan más cosas pero nos hacemos una idea de por donde van los tiros.
Si
nos exigimos menos pero seguimos con la intención de vernos las fotos
publicadas, o con posibilidades de ello y cada foto que sacamos nace con esa
intención, hay objetivos más "oscuros", con diafragmas f4 o incluso un poco
superior que bajan ostensiblemente. Un equipo de estas características baja mucho el precio respecto a uno profesional, puede costar hasta 1.000€ en sus gamas mas bajas con un par de objetivos en oferta con el cuerpo, pero lo normal es que supere los 3.000€. El volumen y peso es inferior pero nada desdeñable.
Y este
es el rango de uso de una cámara réflex: trabajar aprovechando su facilidad
para hacerlo en manual, con luces difíciles o seleccionando las posibilidades
de automatismo con un mayor control sobre él. Sacamos más partido a la cámara en situaciones difíciles si sabemos de fotografía.
Y
cuando se trabaja con réflex hay que recordar que el volumen y el peso que
llevamos es considerable. El ir a cazar la foto por el monte no es su fuerte
sino la espera en lugares apropiados. O sea, que si el primer
sábado nos levantamos salerosos y nos echamos al hombro la mochila de la cámara
para pasar una mañana de campo que nadie diga que no esta avisado.
La
compacta es la cámara que deben de comprar el 95% del aficionados y el 100% de los profesionales (estos para las fotos "robadas" del momento). Por aproximadamente 500€ te compras la ultima Canon SX50HS con un objetivo que llega a ¡1.200mm! con
un diafragma de 6.5f y con estabilizador de imagen. Y la Nikon llega a los 1.000mm con 5.9f cuesta sobre los 400€. Bien es verdad que desde los 24mm hasta
los 1.200mm tenemos un rango muy amplio en el que podamos encontrar la
distancia focal que más nos convenga. ¿Que peros tiene? Pues que cuando la luz
sea pobre la foto se resiente o que con ese disparate de zoom las calidades de
nitidez también se resienten. Pero hasta los peros tienen peros por ese precio.
En pantalla de ordenador se van a ver muy bien y las fotos pobres nos exigirán más en
laboratorio pero algo podremos hacer con ellas. Y sobre todo dejaremos constancia grafica de todo lo que vemos. su escaso volumen y peso la harán imprescindible en todos
nuestros paseos y, por supuesto, en los viajes (esta cabe en una maleta de
Ryanair con el resto de la ropa).
Una
sencilla tabla nos va hacer entender los mm de los objetivos comparándolo con
los aumentos de nuestros prismáticos a los cuales estamos más acostumbrados.
Prismáticos 8x42 mismos aumentos que obj.
400mm
Prismáticos
10x42 mismos aumentos que obj. 500mm
Prismáticos
12x42 mismos aumentos que obj. 600mm
Telescopio
de 25 aumentos similares al obj. 1.200mm
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