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| Grupo en el barco. |
El pasado domingo día 12 un grupo de 45 personas formado por
una parte del GL SEO Asturias y por un grupo de simpatizantes nos dimos cita
para realizar una salida para la observación de aves que poco a poco se va
consolidando entre las actividades constantes que se vienen organizando
periódicamente.
Se trataba de recorrer unas 5 a 6 millas mar adentro desde
Gijón con el fin de poder observar aves marinas en su paso migratorio
postnupcial de otoño hacia las costas del Atlántico meridional.
De este modo partimos del puerto deportivo de Gijón a bordo
de una de las embarcaciones de recreo que recorren la bahía de San Lorenzo en
época estival para mostrar a los turistas la ciudad desde otra perspectiva.
EL día no estaba precisamente radiante pero las condiciones
eran lo suficientemente aceptables como para no poner en duda la partida,
además la predicción, como más tarde se pudo comprobar, era de una mejoría en
el tiempo.
A las 9:00 de la mañana nos embarcamos para abandonar el
puerto con la pleamar bien pertrechados de ropa de abrigo, cámaras fotográficas
y prismáticos (alguno se había incluso dopado con la clásica biodramina).
Al poco tiempo de salir y antes de haber rebasado el nuevo
espigón del superpuerto del Musel ya se pudieron ver algunos ejemplares de
alcatraz atlántico que, provenientes del Este, se dirigían planeando a ras de
agua hacia Poniente. También se pudieron ver garcetas comunes y lo que pareció
ser un mosquitero.
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| Alcatraz Atlántico. (Morus bassanus). Foto: Juan Dalmau |
Al cabo de aproximadamente una hora de navegación en
dirección Norte-nordeste y una vez alcanzada la zona de destino se dio comienzo
a la suelta de pescado que permitió que, a medida que se navegaba en círculos,
se nos aproximasen los primeros ejemplares del alcatraz atlántico. Había
individuos de todas las edades de tal modo que pudimos, además de maravillarnos
con las zambullidas que hacían para alcanzar el alimento que les ofrecíamos,
apreciar las variaciones cromáticas que sufren los plumajes a medida que los
individuos avanzan en edad. Pasan de un color gris/parduzco oscuro profusamente
moteado en blanco con el pico también de tono gris oscuro al blanco inmaculado
con las puntas negras en las alas y el pico típicamente gris azulado, con los correspondientes
estadios intermedios, particulares para cada individuo, en los que se mezclan
ambas coloraciones. Llamó la atención el hecho de que la coloración amarillenta
en la cabeza resultaba más intensa en algunos individuos que en otros no
correspondiendo con la edad puesto que había este hecho se apreciaba tanto en
adultos como en subadultos. Así mismo nos encontramos con tres hermosos
ejemplares de págalo grande siempre dispuestos a aprovecharse de las capturas
de otras especies persiguiendo y acosando a su objetivo hasta que suelta su
presa. Se pudieron ver unos cuantos ejemplares inmaduros de gaviota
patiamarilla y/o sombría con únicamente dos adultos de la primera especie y uno
de la segunda y, lamentablemente en la distancia, se apreciaron tres ejemplares
jóvenes de gaviotas tridáctilas.
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| Alcatraz Atlántico - Juvenil Primer año. (Morus bassanus). Foto: Luis G. Polo |
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| Alcatraz Atlántico de segundo año. (Morus bassanus) Foto: Luis G. Polo |
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| Alcatraz Atlántico de tercer año. (Morus bassanus)Foto: Luis G. Polo |
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| Alcatraz Atlántico de cuarto año. (Morus bassanus) Foto: Luis G. Polo |
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| Alcatraz Atlántico. Adulto. (Morus bassanus) Foto: Luis G. Polo |
Por lo que respecta a otras familias tuvimos la fortuna de
que pasasen cerca de nuestra posición un bando de negrones comunes compuesto
por seis individuos (cuatro machos y dos hembras) volando a ras de la superficie
en la típica formación en “V” en dirección como las demás migrantes a Galicia y
se pudo apreciar otro pequeño grupo bastante más alejado.
Del grupo de las pelágicas, disfrutamos de varios
avistamientos de pardelas cenicientas, baleares y sombrías que si bien no
fueron muy numerosas sí crearon gran expectación con los siempre impresionantes
vuelos planeados aprovechando los vientos y corrientes que se forman sobre la
superficie acuática.
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| Pardela cenicienta. (Calonectris diomedea). Foto: Juan Dalmau. |
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| Pardela sombría (Puffinus griseus). Foto: Juan Dalmau |
Pudimos observar así mismo el curioso comportamiento de
paseriformes puesto que se nos aproximaron algunos mosquiteros y una bisbita
que, al darse cuenta de la cantidad de personas que había a bordo de la
embarcación, renunciaban a posarse en la embarcación para tomar el merecido
respiro que necesitaban para poder llegar a tierra tras haber atravesado, quien
sabe cuantas millas, sobre el Golfo de Vizcaya. Se vio incluso como, por espacio de un cortísimo instante,
apoyan las patas para “rebotar” sobre el agua y darse así un impulso que les
permite remontar el vuelo para continuar avanzando hacia tierra firme. Se alcanzó
a ver a un grupo de collalbas que se dirigían también hacia la costa.
Como “traca final”, ya de vuelta a puerto tras algo más de
una hora de rondar y macizar con pescado tuvimos la enorme suerte de que nos
visitara un ejemplar de págalo pomarino que, acercándose desde popa, se puso en
paralelo durante unos instantes a la embarcación, tan próximo a esta que los
pasajeros de la plataforma superior que se encontraban en la banda de estribor
casi lo hubiesen podido tocar con la mano a poco que se lo hubiesen propuesto.
Para completar la lista de especies, deberiamos añadir que entre el grupo de migrantes se pudieron ver alondras, escribanos, un andarrios, un grupo de agujas. Ya en la bahia de Gijón se vió Gaviota reidora, Cormorán moñudo y un vuelvepiedras.
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| Gaviota patiamarilla - Juvenir 1º año. (Larus michahellis). Foto Juan Dalmau |
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| Alcatraz Atlántico. (Morus bassanus) Foto: Juan Dalmau |
Texto: Santiago Hernández Sande.
